GARCIA LORCA, Federico
Gacela of the Dead Child
Each afternoon in Granada,
each afternoon, a child dies.
Each afternoon the water sits down
and chats with its companions.
The dead wear mossy wings.
The cloudy wind and the clear wind
are two pheasants in flight through the towers,
and the day is a wounded boy.
Not a flicker of lark was left in the air
when I met you in the caverns of wine.
Not the crumb of a cloud was left in the ground
when you were drowned in the river.
A giant of water fell down over the hills,
and the valley was tumbling with lilies and dogs.
In my hands' violet shadow, your body,
dead on the bank, was an angel of coldness.
Dance
Carmen is dancing
in the streets of Seville.
Her hair is white
and her pupils sparkle.
Girls, close the curtains!
Around her head is entwined
a yellow snake.
And she is dreaming, dancing
with gentlemen from the past.
Girls, close the curtains!
The streets are deserted
and in the shadows are gleamed
Andalucian hearts
Unearthing old sorrows.
Girls, close the curtains!
Teoría y juego del duende
…..
moriré dentro del rosal matar me han. Yo me iba, mi madre, las rosas a coger, hallara la muerte dentro del vergel. Yo me iba, madre, las rosas a cortar, hallara la muerte dentro del rosal. Dentro del vergel moriré, dentro del rosal matar me han.
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I shall die, in the rose-tree they will kill me, Mother I went to gather roses, looking for death within the garden. Mother I went cutting roses, looking for death within the rose-tree. In the garden I shall die. In the rose-tree they’ll kill me.
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Romance de la muerte de Torrijos
Torrijos, el general
noble, de la frente limpia,
donde se estaban mirando
las gentes de Andalucía,
caballero entre los duques,
corazón de plata fina,
ha sido muerto en las playas
de Málaga la bravía.
Le atrajeron con engaños
que él creyó, por su desdicha,
y se acercó, satisfecho
con sus buques, a la orilla,
¡Malhaya el corazón noble
que de los malos se fía!,
que al poner el pie en la arena
lo prendieron los realistas.
El vizconde de La Barthe,
que mandaba las milicias,
debió cortarse la mano
antes de tal villanía,
como es quitar a Torrijos
bella espada que ceñía,
con el puño de cristal,
adornado con dos cintas.
Muy de noche lo mataron
con toda su compañía.
Caballero entre los duques,
corazón de plata fina.
Grandes nubes se levantan
sobre la tierra de Mijas.
El viento mueve la mar
y los barcos se retiran
con los remos presurosos
y las velas extendidas.
Entre el ruido de las olas
sonó la fusilería,
y muerto quedó en la arena,
sangrando por tres heridas,
el valiente caballero,
con toda su compañía.
La muerte, con ser la muerte,
no deshojó su sonrisa.
Sobre los barcos lloraba
toda la marinería,
y las más bellas mujeres,
enlutadas y afligidas,
lo iban llorando también
por el limonar arriba.
La casada infiel
The unfaithful wife
Foolish me, that brought her to the river
thinking she was a maiden,
but she had a husband.3
It was on Santiago's night 1
and almost out of a sense of duty.
The street lights went out
and the crickets lit up.
On the last corners
I touched her sleeping breasts,
and suddenly they opened up
like wreaths of hyacinths.
The starch of his slip
resounded in my ear
like a fine piece of silk
shredded by ten knives.
Without silvery light on their tops
the trees have grown,
and an horizon of dogs
barks far away from the river.
Past the blackberry shrubs,
the rushes and the hawthorns,
under his head of hair
I made a hole in the silt.
I took off my necktie,
and she took off her dress.
Me, the belt with the revolver,
her, her four bodices.
no tuberose or seashell
have so smooth a face,
nor the moon reflected on glass
shines with such a radiance.
Her thighs ran away from me
like surprised fishes,
half of them full of embers,
half of them full of cold.
That night I ran through
the best of paths
riding a mother-of-pearl mare
without bridles or stirrups.
Because I'm a gentleman, I won't repeat
the things that she told me.
The light of understanding
makes me prudent with my words.
Dirty with sand and kisses,
I took her away from the river.
The air was fighting against
the lilies' swords.
I behaved like what I am,
a gipsy through and through.
I gifted her a big sewing box
made of straw-like satin,
and I didn't want to fall in love
because, having a husband
she told me she was a maiden
as I carried her to the river.
Este galapaguito
NANA DE SEVILLA
Este galapaguito
no tiene mare;
lo parió una gitana,
lo echó a la calle.
No tiene mare, sí;
no tiene mare, no:
no tiene mare,
lo echó a la calle.
Este niño chiquito
no tiene cuna;
su padre es carpintero
y le hará una.
ni Sevilla tiene amor. Morena, qué luz de fuego. Préstame tu quitasol.
-zumo de lima y limón - tus palabras, pececillos, nadarán alrededor.
Ay, amor. Ni Sevilla tiene amor!
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en in Sevilla vind je ook geen liefde. Brunette, wàt een licht van vuur. Leen me je parasol.
- sap van limoen en citroen -, je woorden – visjes -
zwemmen rond.
Oh!, liefste.
nor does Sevilla has love. Brunette, what a firelight, lend me your parasol.
juice of lime and lemon your words, tiny fishes, will swim around.
Ay, love! And there is no love in Sevilla!
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es un remanso del amor.
un remanso del tiempo. Un nudo del tiempo.
un remanso del grito.
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is een rustplek van de liefde.
een water van de tijd. Een knoop in de tijd.
een haven van de schreeuw.
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Pequeño poema infinito
Equivocar el camino
es llegar a la nieve
y llegar a la nieve
es pacer durante veinte siglos las hierbas de los cementerios.
Equivocar el camino
es llegar a la mujer,
la mujer que no teme la luz,
la mujer que no teme a los gallos
y los gallos que no saben cantar sobre la nieve.
Pero si la nieve se equivoca de corazón
puede llegar el viento Austro
y como el aire no hace caso de los gemidos
tendremos que pacer otra vez las hierbas de los cementerios.
Yo vi dos dolorosas espigas de cera
que enterraban un paisaje de volcanes
y vi dos niños locos que empujaban llorando las pupilas de un asesino.
Pero el dos no ha sido nunca un número
porque es una angustia y su sombra,
porque es la guitarra donde el amor se desespera,
porque es la demostración de otro infinito que no es suyo
y es las murallas del muerto
y el castigo de la nueva resurrección sin finales.
Los muertos odian el número dos,
pero el número dos adormece a las mujeres
y como la mujer teme la luz
la luz tiembla delante de los gallos
y los gallos sólo saben votar sobre la nieve
tendremos que pacer sin descanso las hierbas de los cementerios.
Poema para los muertos
Yo me cortaré la mano derecha. Espera. Las hierbas. Tengo un guante de mercurio y otro de seda. Espera. ¡Las hierbas! No solloces. Silencio, que no nos sientan. Espera.! ¡Las hierbas! Se cayeron las estatuas al abrirse la gran puerta.
¡Las hierbaaas!
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Ik ga mijn rechterhand afhakken. Wacht even. Het gras. Ik heb een handschoen van kwikzilver en een andere van zijde. Wacht even. Het gras ! Snik niet. Stil, dat ze ons niet horen. Wacht even ! Het gras ! De beelden verbrokkelen bij het opengaan van de grote poort. Het graáás !
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alejarme del tumulto de los cementerios. Quiero dormir el sueño de aquel niño
que quería cortarse el corazón en alta mar.
que los muertos no pierden la sangre;
que la boca podrida sigue pidiendo agua.
de los martirios que da la hierba, ni de la luna con boca de serpiente
que trabaja antes del amanecer.
un rato, un minuto, un siglo; pero que todos sepan que no he muerto; que hay un establo de oro en mis labios; que soy el pequeño amigo del viento Oeste
que soy la sombra inmensa de mis lágrimas.
porque me arrojará puñados de hormigas, y moja con agua dura mis zapatos
para que resbale la pinza de su alacrán.
para aprender un llanto que me limpie de tierra; porque quiero vivir con aquel niño oscuro
que quería cortarse el corazón en alta mar.
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I want to get far away from the busyness of the cemeteries. I want to sleep the sleep of that child
who longed to cut his heart open far out at sea.
how the corpse keeps all its blood,
how the decaying mouth goes on begging for water.
about the torture sessions the grass arranges for nor about how the moon does all its work
before dawn with its snakelike nose.
a second, a minute, a century, but I want everyone to know that I am still alive, that I have a golden manger inside my lips, that I am the little friend of the west wind,
that I am the elephantine shadow of my own tears.
because I know dawn will toss fistfuls of ants at me, and pour a little hard water over my shoes
so that the scorpion claws of the dawn will slip off.
and learn a mournful song that will clean all earth away from me, because I want to live with that shadowy child
who longed to cut his heart open far out at sea.
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un hombro donde solloza la muerte y un bosque de palomas disecadas. Hay un fragmento de la mañana en el museo de la escarcha. Hay un salón con mil ventanas. ¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals con la boca cerrada.
de sí, de muerte y de coñac
que moja su cola en el mar.
con la butaca y el libro muerto, por el melancólico pasillo, en el oscuro desván del lirio, en nuestra cama de la luna y en la danza que sueña la tortuga. ¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals de quebrada cintura.
donde juegan tu boca y los ecos. Hay una muerte para piano que pinta de azul a los muchachos. Hay mendigos por los tejados. Hay frescas guirnaldas de llanto. ¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals que se muere en mis brazos.
en el desván donde juegan los niños, soñando viejas luces de Hungría por los rumores de la tarde tibia, viendo ovejas y lirios de nieve por el silencio oscuro de tu frente. ¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals del "Te quiero siempre".
con un disfraz que tenga cabeza de río. ¡Mira qué orilla tengo de jacintos! Dejaré mi boca entre tus piernas, mi alma en fotografías y azucenas, y en las ondas oscuras de tu andar quiero, amor mío, amor mío, dejar,
violín y sepulcro, las cintas del vals
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een schouder waarop de dood uithuilt, een bos van opgezette duivenlichamen. Er is een flard van de morgen in ‘t museum van rijm geborgen, Er is een zaal met duizend ramen. Ai, ai, ai, ai!
Wals met mij met de mond verborgen.
van ja, van dood en brandewijn
die zijn sleep in de zee dipt.
met de leunstoel en de dode zang, door de droefgeestige gang, op de duistere zolder met leliebehang, in ons bed van de maan is het feest en in de droomdans der schildpad het meest. Ai, ai, ai, ai!
Wals met mij de dans van de gebroken leest.
waarin je mond en de echo’s opfleuren. Aan de piano wordt doods gezwegen zó dat de jongens er blauw van kleuren. Er zijn bedelaars op daken te bespeuren. Er zijn verse kransen van snikken geregen. Ai, ai, ai, ai!
Wals met mij in mijn armen uitentreuren.
op zolder waar kinderen spelen, 'k Wil van oude Hongaarse lampen dromen, die door ‘t rumoer van de lauwe middag komen, schapen zien en lelies van sneeuwlicht doorheen de donkere stilte van je gezicht. Ai, ai, ai, ai!
Wals met mij dit eeuwige liefdesgedicht.
vermomd als 't hoofd van een rivier. Kijk naar mijn oevers van hyacinten! ‘k Zal mijn mond tussen je dijen begraven, mijn ziel aan foto’s en witlelies laven, en in je donkere rondingen dolen mijn lief, mijn lief, ik wil je beloven
viool en graf, de linten van de wals.
There's a shoulder where Death comes to cry There's a lobby with nine hundred windows There's a tree where the doves go to die There's a piece that was torn from the morning And it hangs in the Gallery of Frost Ay, ay, ay, ay! Take this waltz, take this waltz
Take this waltz with the clamp on its jaws
On a chair with a dead magazine In the cave at the tip of the lilly In some hallway where love's never been On a bed where the moon has been sweating In a cry filled with footsteps and sand
Take this waltz, take this waltz
Take its broken waist in your hand
With its very own breath of brandy and Death
Dragging its tail in the sea
Where your mouth had a thousand reviews There's a bar where the boys have stopped talking They've been sentenced to death by the blues Ah, but who is it climbs to your picture
With a garland of freshly cut tears?
Take this waltz, take this waltz
Take this waltz, it's been dying for years
Where I've got to lie down with you soon In a dream of Hungarian lanterns In the mist of some sweet afternoon And I'll see what you've chained to your sorrow
All your sheep and your lillies of snow
Take this waltz, take this waltz
With its "I'll never forget you, you know!"
With its very own breath of brandy and Death
Dragging its tail in the sea
I'll be wearing a river's disguise The hyacinth wild on my shoulder My mouth on the dew of your thighs And I'll bury my soul in a scrapbook With the photographs there, and the moss And I'll yield to the flood of your beauty My cheap violin and my cross And you'll carry me down on your dancing
To the pools that you lift on your wrist
Take this waltz, take this waltz
It's yours now, it's all that there is
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campo amarillo.
campo amarillo.
va caminando un olivo
olivo
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Yellow
fi
eld.
Yellow
fi
eld.
an olive tree drifts.
olive
tree.
Gele akker.
Gele akker.
stapt een olijfboom.
olijfboom.
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Lejana y sola. Jaca negra, luna grande, y aceitunas en mi alforja. Aunque sepa los caminos, yo nunca llegaré a Córdoba. Por el llano, por el viento, jaca negra, luna roja. La muerte me está mirando desde las torres de Córdoba. ¡Ay que camino tan largo! ¡Ay mi jaca valerosa! ¡Ay que la muerte me espera, antes de llegar a Córdoba! Córdoba. Lejana y sola.
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Distant and alone. A black nag, the giant moon, and olives in my saddlebag. Even if I know the way, I never will reach Cordoba. Over the plain, through the wind, A black nag, the bloody moon. The Reaper is watching me From the tall towers of Cordoba. Oh, such a long road! Oh, my valiant nag! Oh, the Reaper awaits me before I ever reach Cordoba! Cordoba.
Distant and alone.
Ver en eenzaam. Gitzwart paard, volle maan, En olijven in zijn zadeltas. Al ken ik de wegen Nimmer kom ik toch in Cordoba aan. Langs de vlakte, langs de bries, Gitzwart paard, rode maan, Van op de toren van Cordoba. Ach, wat een lange weg! Ach, mijn moedig paard! En dat de dood mij wacht Eer ik aankom in Cordoba. Cordoba,
Ver en eenzaam.
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cavan buscando la aurora, cuando por el monte oscuro baja Soledad Montoya. Cobre amarillo, su carne, Huele a caballo y a sombra. Yunques ahumados sus pechos, gimen canciones redondas. Soledad: ¿por quién preguntas sin compaña y a estas horas? Pregunte por quien pregunte, dime: ¿a ti qué se te importa? Vengo a buscar lo que busco, mi alegría y mi persona. Soledad de mis pesares, caballo que se desboca, al fin encuentra la mar y se lo tragan las olas. No me recuerdes el mar que la pena brota en las tierras de aceituna bajo el rumor de las hojas. ¡Soledad, qué pena tienes! Lloras zumo de limón agrio de espera y de boca. ¡Qué pena tan grande! Corro mi casa como una loca, mis dos trenzas por el suelo de la cocina a la alcoba. ¡Qué pena! Me estoy poniendo de azabache, carne y ropa. ¡Ay mis camisas de hilo! ¡Ay mis muslos de amapola! Soledad: lava tu cuerpo con agua de las alondras, y deja tu corazón en paz, Soledad Montoya.
volante de cielo y hojas. Con flores de calabaza, la nueva luz se corona. ¡Oh pena de los gitanos! Pena limpia y siempre sola. ¡Oh pena de cauce oculto
y madrugada remota!
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excavate the dawn as Soledad Montoya climbs down the dark mountain. Yellow copper, her flesh. Scent of horses and shadows. Her breasts, two smoking anvils, resound with round moans. Soledad, whom do you ask for, alone and at this hour? ‘What does it matter? I ask for the one I ask for. I seek what I am searching for: my joy and my own self.’ Soledad of my sorrow, hard-mouthed and untameable, in the end you’ll reach the sea, and waves will swallow you. ‘Don’t remind me of the sea, for if you do the black pain will unfurl in the land of olives beneath the rumour of leaf-rain.’ Soledad, what hurt you suffer! Lemon tears bitter with waiting roll into your mouth. ‘What enormous pain! I run back and forth like a madwoman, from hearth to bed-post, my braids dragging on the ground. What pain! I am turning into jet: black flesh, black clothes. Ay, my fine linen shifts! Ay, my thighs frail as poppies!’ Soledad, wash your body ith the dew of skylarks. Soledad Montoya, rest your heart in remotest peace.
streaming with sky and leaves. New light crowns itself with yellow squash-flowers. Oh the pain of the gypsies! Pain so clean and alone. Pain of hidden river-beds
and unapproachable dawns.
graven speurend naar de dageraad als van de sombere glooiing afdaalt Soledad Montoya. Geel koper, haar lichaam geurt naar paard en naar schaduw. Rookdonkere aambeelden haar borsten, kreunen welvende liederen. - Soledad, naar wie zoek je zo alleen en op dit uur? -Dat ik zoeke wie ik zoek, zeg me, wat gaat jou dat aan? Ik kom zoeken wat ik zoek, mijn levenslust en mijzelf. - Soledad van mijn meewaren, paard zonder bit holt voort, stuit uiteindelijk op de zee en de golven voeren het mee. - Aan de zee hoef je mij niet te herinneren, de zwarte pijn ontspruit aan de olijfgronden onder het geruis van het lover. - Soledad, wat een pijn lijd je! Wat een schrijnende pijn! Je weent sap van citroen wrang van verlangen en van mond. - Wat een grote pijn! Ik ren moor mijn huis als waanzinnig, met mijn twee vlechten over de grond, van de keuken naar de alkoof. Wat een pijn! Mijn lichaam en linnen maak ik tot git. Ach, mijn hemden van lijnwaad! Ach mijn dijen van papaver! - Soledad, was je lichaam met water van de leeuweriken, en laat je hart met vrede, Soledad Montoya.
strook van hemel en van lover. Met kalebasbloemen kranst zich het nieuwe licht. O pijn van de gitano’s Heldere pijn en altijd en eenzaam. O pijn van verborgen bedding en oeroude dageraad!
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Ya se acabó. ¿Qué pasa? ¡Contemplad su figura! La muerte le ha cubierto de pálidos azufres
y le ha puesto cabeza de oscuro minotauro.
El aire como loco deja su pecho hundido, y el Amor, empapado con lágrimas de nieve,
se calienta en la cumbre de las ganaderías.
Estamos con un cuerpo presente que se esfuma, con una forma clara que tuvo ruiseñores
y la vemos llenarse de agujeros sin fondo.
Aquí no canta nadie, ni llora en el rincón, ni pica las espuelas, ni espanta la serpiente. Aquí no quiero más que los ojos redondos
para ver ese cuerpo sin posible descanso.
los que doman caballos y dominan los ríos, Llanto por Ignacio Sánchez Mejías los hombres que les suena el esqueleto y cantan
con una boca llena de sal y pedernales.
delante de este cuerpo con las riendas quebradas. Yo quiero que me enseñen donde está la salida
para este capitán atado con la muerte.
que tenga dulces nieblas y profundas orillas, para llevar el cuerpo de Ignacio y que se pierda
sin escuchar el doble resuello de los toros.
que finge cuando niña doliente res inmóvil; que se pierda en la noche sin canto de los peces
y en la maleza blanca del humo congelado.
para que se acostumbre con la muerte que lleva. Vete, Ignacio: No sientas el caliente bramido. Duerme, vuela, reposa ¡También se muere el mar! |
Hij is niet meer! Wat gaat hier om? Aanschouwt zijn gedaante: De dood heeft hem bedekt met bleke fosforen
En hem opgezet hoofd van donkere minotaur.
Wij toeven met een aanwezig lichaam dat zich oplost, Met een heldere vorm die nachtegalen rijk was,
En wij zien deze zich doorzeven met holten zonder bodem.
Hier zingt niemand, noch weent in de hoek, Noch drijft de sporen in, noch zweept de slang op; Hier wil ik niets anders dan opengesperde ogen Om te zien dit lichaam zonder mogelijke rust.
Zij, die paarden temmen en de rivieren beheersen: De mannen van wie het skelet rinkelt en die zingen
Met een mond vol zon en bergkristallen.
Met zachte nevelen en diepe oevers, Om mee te voeren het lichaam van Ignacio en die wegvloeit
Zonder te luisteren naar het dubbele snuiven van de stieren.
Om vertrouwd te worden met de dood die hij in zich draagt. Vaarwel, Ignacio: mocht je het hete loeien niet horen.
Slaap, zweef, rust: Zo ook sterft de zee!
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seco y verdí. La niña del bello rostro está cogiendo aceituna. El viento, galán de torres, la prende por la cintura. Pasaron cuatro jinetes sobre jacas andaluzas, con trajes de azul y verde, con largas capas oscuras. "Vente a Córdoba, muchacha." La niña no los escucha. Pasaron tres torerillos delgaditos de cintura, con trajes color naranja y espadas de plata antigua. "Vente a Sevilla, muchacha." La niña no los escucha. Cuando la tarde se puso morada, con lux difusa, pasó un joven que llevaba rosas y mirtos de luna. "Vente a Granada, muchacha." Y la niña no lo escucha. La niña del bello rostro sigue cogiendo aceituna, con el brazo gris del viento ceñido por la cintura. Arbolé, arbolé.
Seco y verdé.
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dry and green. The girl with the pretty face is out picking olives. The wind, playboy of towers, grabs her around the waist. Four riders passed by on Andalusian ponies, with blue and green jackets and big, dark capes. "Come to Cordoba, muchacha." The girl won't listen to them. Three young bullfighters passed, slender in the waist, with jackets the color of oranges and swords of ancient silver. "Come to Sevilla, muchacha." The girl won't listen to them. When the afternoon had turned dark brown, with scattered light, a young man passed by, wearing roses and myrtle of the moon. "Come to Granada, muchacha." And the girl won't listen to him. The girl with the pretty face keeps on picking olives with the grey arm of the wind wrapped around her waist. Tree, tree
dry and green.
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